JOSÉ JAVIER COMAS RÓDRÍGUEZ

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El desprendimiento de un pequeño fragmento de la cornisa de la torre de la Parroquia de Santa Ana, días atrás, va a alterar el desarrollo de las luninarias y la interpretación de los tradicionales Gozos. En este sentido, la banda de cornetas y tambores de las Tres Caídas interpretará los habituales gozos desde el interior del templo, ubicando a sus músicos en cada una de las puertas.

Así se ha consensuado con el párroco de Santa Ana, Eugenio Hernández, con objeto de que evitar posibles nuevos desprendimientos.

Susto el sábado

En la mañana del pasado sábado, un suceso preocupó a los vecinos de Triana y del entorno de la parroquia de Santa Ana. El desprendimiento de una parte de la cornisa que recubre la barroca torre provocó el acotamiento del perímetro en el lateral oeste del edificio.

El suceso ocurrió a primera hora de la mañana del sábado 20 de julio, vísperas del inicio de la Velá dedicada a la Señá Santana. Un motorista estacionado a los pies de la torre viviría el suceso en primera persona, donde la piedra, del tamaño del puño de una mano, llegó a caer a escasos metros del protagonista sin causar ningún tipo de daño. El sorprendido no dudó en comunicarlo a la parroquia, tomando al instante las medidas de seguridad oportunas.

El hecho provocó el acotamiento urgente del lateral situado en la Plazuela de Santa Ana, impidiendo el paso a los viandantes en el espacio comprendido en la acera oeste del templo.

Todo esto ha provocado la modificación en el desarrollo de las luminarias dedicadas a la santa donde la Banda de CC.TT. de las Tres Caídas interpretaría los cuatro toques mientras las bengalas lucirían desde la propia torre.

Con ello, la formación musical realizará su actuación a nivel del suelo, ante las tres puertas que dan acceso a la calle (Vázquez de Leca, Plazuela de Santa Ana y Bernardo Guerra), además del cuarto toque, que será ante la Señora Santa Ana.

A la parte superior solo podrán acceder los encargados de encender las bengalas que adornarán la parroquia.

Tranquilidad

Desde la dirección parroquial se ha querido transmitir tranquilidad ante el inesperado asunto, donde no aparenta graves consecuencias sobre la iglesia del siglo XIII.

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REDACCIÓN. El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, espera que “en los próximos días”, principalmente “antes de final de junio”, obre en su poder el documento definitivo del estudio encomendado a la empresa Geotecnia y Cimientos S.A. (‘Geocisa’), para determinar el estado real de la iglesia gótico mudéjar de Santa Catalina, declarada monumento nacional en 1912 y cerrada al culto desde hace ya más de ocho años. Una vez esté sobre la mesa el documento definitivo del estudio, las previsiones de Asenjo pasan por “encargar” directamente al arquitecto Francisco Jurado Jiménez la redacción del proyecto integral de restauración, para que las obras comiencen “a principios de 2014″.

Como se recordará, la Archidiócesis había contratado a la empresa Geotecnia y Cimientos S.A., para determinar el estado real de esta emblemática iglesia declarada monumento nacional en 1912 y Bien de Interés Cultural (BIC) en 1985, correspondiendo al arquitecto Francisco Jurado la dirección de estas actuaciones que contemplan, entre otros aspectos, un levantamiento gráfico y cuantificado de las patologías actuales y un control monitorizado de movimientos del conjunto arquitectónico. El objetivo de las actuaciones es conocer el estado real del monumento para diseñar su restauración integral, extremo cuya financiación aún deben zanjar la Archidiócesis y las instituciones públicas.

Este jueves, en ese sentido, el arzobispo de Sevilla ha manifestado, en una rueda de prensa, que si bien aún no cuenta con “el informe definitivo” del trabajo realizado por ‘Geocisa’, dicho documento llegará finalmente a sus manos “en los próximos días, antes de final de junio”. “Una vez tengamos el informe definitivo, haremos el encargo formal del proyecto al arquitecto Francisco Jurado”, ha explicado Juan José Asenjo. Su idea, según ha concretado, es que la redacción del proyecto de intervención, que como se ha señalado corresponderá a Francisco Jurado, no se prolongue “más allá del segundo semestre” de este año, porque su propósito es que las obras comiencen “a principios de 2014″.

Finalmente, ha ratificado la idea de que, merced a los resultados parciales del trabajo elaborado por ‘Geocisa’, parece claro que el templo no corre peligro, extremo que había avanzado el propio arquitecto Francisco Jurado al comienzo de estos estudios arquitectónicos. Precisamente por eso, el coste total del proyecto de restauración integral será “inferior” a lo inicialmente previsto.